En el post anterior analizamos la dieta sin lácteos y una de las causas para la eliminación de este grupo de alimentos es la intolerancia a la lactosa. A continuación analizamos algunos detalles de esta intolerancia.
La lactosa es el principal azúcar de la leche y de sus derivados. La intolerancia a la lactosa se produce por el déficit de lactasa, una enzima del intestino delgado que degrada la lactosa. Cuando la lactasa no funciona bien, la lactosa no digerida pasa al colon y las bacterias la descomponen formando ácidos, agua y gas, que son los que favorecen los síntomas (flatulencia, dolor abdominal, movimientos intestinales, diarrea, etc.).
El déficit de lactasa puede ser permanente o transitorio, provocado por infecciones, gastroenteritis o inflamaciones. La intolerancia puede ser total o parcial en función de la actividad de la enzima. Cuando existe una intolerancia a la lactosa se debe seguir una dieta personalizada en función de las circunstancias de cada uno.
Cuando una persona toma la decisión de eliminar de su dieta la lactosa sin tener un diagnóstico que lo indique o sin control por parte de su dietista o nutricionista, el cuerpo reduce la síntesis de lactasa y, si al tiempo se vuelve a incorporar la lactosa, puede ocurrir una intolerancia debido a esa falta de lactasa. Por esto es tan importante tener la indicación médica o del dietista-nutricionista a la hora de eliminar los lácteos de la dieta por algún síntoma que se asocie a su consumo por decisión del paciente.
Pueden contener lactosa algunos medicamentos, pasta dentífrica o complejos vitamínicos.
Alimentos a excluir en la intolerancia a la lactosa
En la intolerancia a la lactosa, cada persona tiene un nivel de tolerancia diferente. Hay quien no puede tomar ningún tipo de leche (vaca, cabra, oveja…) o quizá pueda tolerar una pequeña cantidad diaria.
Los lácteos fermentados (yogur, kefir, queso) tienen menos cantidad de lactosa en su composición y son mejor tolerados en general, pero cada caso particular tiene su nivel de tolerancia.
Aquí, la persona con intolerancia a la lactosa y su dietista-nutricionista, tienen que hacer un trabajo conjunto de control de las cantidades que tolera de cada alimento con leche y determinar cuánto puede tomar al día para no experimentar sintomatología.
Ideas de recetas sin lactosa
En esta página puedes encontrar recetas sin lactosa y aquí recetas de postres sin lactosa para poder inspirarte al realizar tus menús para colectividades.
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Un abrazo, Imma.